Rubén llevaba horas buscando su monopatín por todo el pueblo. Había salido muy pronto a buscar un encargo especial a la Confitería de Laura y estaba tan dormido que ni se dio cuenta de que había olvidado el monopatín que le había regalado el abuelo Ramón por sacar buenas notas.
Rubén era alto, muy alto, fuerte, muy fuerte, y solía tener el gesto fruncido, como cuando te da el sol todo el rato, lo que hacía que no contara con muchos amigos en su lista. El no quería tener esa cara de malas pulgas pero, ¡qué podía hacer si había nacido así! Rubén ayudaba mucho a su mamá y a su hermana pequeña, Clara, y sacaba unas notas estupendas. Sólo que era un poco bruto, sí, por más que nos empeñemos Rubén era un poco bruto.
Y como os decía, cuando llegó a casa con la bandeja de pasteles y se lavó la cara por tercera vez para despertarse, se dio cuenta de que no tenía su monopatín. Y salió pitando. Estaba dispuesto a recuperar su mejor regalo a cualquier precio. Recorrió calle por calle, casa por casa, puerta por puerta. Caminó una hora sin descanso, hasta que se acordó de Laura, sus pasteles, y la confitería. ¡Claro! ¡Qué despistado estoy! ¡Cómo no he caído! Y cuando llegó a su destino y vio a lo lejos su monopatín que brillaba en los pies de otro niño…Rubén se enfadó muchísimo. Tanto, que primero se puso rojo de rabia, luego azul. Le pareció que tenía algo así como un volcán en la tripa. Ya le habían enseñado que lo mejor en estos casos es contar hasta 10, pero Rubén no estaba ahora para contar.
¡Eh! ¡Tú! Pedazo de alcornoque ¿qué haces con mi monopatín? le gritó. Hugo estaba, estaba…digamos que aterrorizado, incluso estuvo a punto de hacerse pis encima, pero disimuló lo mejor que pudo.
-¿Y quién dice que es tuyo? Le contestó Hugo, estaba abandonado y Quien Lo Encuentra Se Lo Guarda. Rubén ya empezaba a ponerse de color verde.
-¿Nunca lo has oído? Instió. 1+1 son dos y Quien lo Encuentra Se Lo Guarda. La cara de Rubén estaba pasando a ser violeta cuando Miguel le dijo a Ernesto: Sólo hay una persona que puede arreglar esto. Sabes de quién se trata ¿verdad amigo? ¡Vamos! ¡No hay tiempo que perder!
¿Y vosotros? ¿Lo sabéis? Claro que lo sabéis.
CONTINUARÁ…
El doctor pantunflas !!!! Siiiiii
¡Qué bien que esperes los lunes con ilusión!